Sydney quiere ser olímpica

Ha heredado el espíritu olímpico de sus padres. Su nombre es Sydney Leblic, es fan de Mireia Belmonte, y su sueño, representar a España en unos Juegos.

 

(Foto: Fernando Olmeda)

Va vestida con una camiseta del equipo olímpico español y unas mallas que hoy le dan calor, además de una medalla de plástico en el pecho y un montón de pines. En sus mejillas, los colores de la bandera de España. En la frente, el nombre de Teresa. Teresa Portela. Sydney Leblic tiene diez años, inicia en septiembre sexto de primaria en el colegio Base de Madrid, le gustan las matemáticas y practica la natación. Sus deportistas preferidas son Mireia Belmonte y Ruth Beitia, con quien coincidió en el vuelo de Madrid a Rio.

Ha venido con sus padres y su hermano exclusivamente a ver los Juegos. El Pan de Azúcar, el Corcovado o Copacabana no están en sus prioridades. Hoy están animando a la palista gallega en la final, aunque David, de seis años, apenas presta atención a lo que ocurre en la laguna. Prefiere entretenerse con la tablet.

"Me gusta mi nombre. Es muy especial, pero sobre es especial para mis padres", dice, en la primera entrevista de su vida. ¿De dónde viene un nombre tan olímpico? Responde su padre, Marcos García: “Nuestro viaje de novios fue a Sydney, para ver los Juegos. Nos encantó la ciudad y el ambiente olímpico. Decidimos repetir en Atenas, y al año siguiente nació Sydney. Nos gustaba el nombre. Le cambiamos el orden de los apellidos, por eso es Leblic García”.

(Foto: Fernando Olmeda)

Una familia con espíritu olímpico. Marcos y María del Mar han estado en todos los Juegos de verano desde 2000. No podían faltar a la cita de Rio, los primeros de sus hijos: “Si te gusta y tienes capacidad económica, como es nuestro caso, pues merece la pena, aunque, la verdad, hemos encontrado problemas de movilidad, como todo el mundo, sobre todo el caos de los autobuses; además, el Parque Olímpico tampoco ofrece demasiada variedad de comidas para los niños; y en cuanto a organización, cosas raras, como poner la semifinal de dobles de Nadal y López en una pista pequeña que enseguida se llenó. Menos mal que en la de al lado jugaban Garbiñe y Carla. Las vimos perder”.

Compraron las entradas con un año de antelación a través de la agencia oficial francesa.También reservaron con tiempo avión y hotel. Han visto varias competiciones, entre ellas la prueba en la que Mireia Belmonte conquistó el oro. Estarán en Rio hasta que acaben los Juegos, yendo de un sitio para otro animando a los españoles.

(Foto: Fernando Olmeda)

Sydney opina que Teresa Portela ha hecho una buena carrera, a pesar de haberse quedado lejos de las mejores. Un rato después, sus ganas de ver a un español en el podio tendrán recompensa. Marcus Cooper Walz gana su prueba y se cuelga la medalla de oro. Su hermano sigue jugando con la tablet.

Quiere llegar a ser olímpica. Emular a Mireia Belmonte, aunque la prueba que entrena en el club El Valle es la de los 400 metros libres. Sus padres ya tienen Tokio’20 marcado en el calendario familiar.