La deportista más odiada en Rio'16
Desde sus bromas pesadas con el zika, al mal perder que demostró al quedar eliminada su selección del torneo olímpico. Se ha ganado por méritos propios el primer lugar en el ranking de deportistas más odiados de los Juegos de Rio.
Nada que ver con la admiración que despiertan sus compatriotas Simone Biles y Michael Phelps, los "reyes" de estos Juegos (hasta la llegada de Usain Bolt). Hope Solo ha sido la futbolista que más abucheos del público brasileño ha recibido en los cuatro partidos que ha disputado. No es sentimiento antiamericano. Es más bien inquina hacia la jugadora de Richland (Washington), considerada como la mejor portera del mundo. aunque siempre se ha visto salpicada por la polémica. En los Juegos, de nuevo ha sido blanco de las críticas.
Todo comenzó cuando se le ocurrió la infeliz idea de cargas las tintas sobre el "descomunal" peligro que significaba el zika, con esta foto en su cuenta de Instagram (800.000 seguidores, pocos para los que ella desearía):
Esta foto incendió las redes sociales e incomodó a la opinión pública brasileña, que lo tuvo muy cuenta en cada partido que ha disputado la selección norteamericana en los Juegos. Cada vez que Hope Solo ponía el balón en movimiento, el público coreaba un sonoro ¡uuuuuu, Zika!.
Como la portera de la selección femenina de fútbol de Estados Unidos lo tiene todo: ignorancia, prepotencia y mal perder, los brasileños también celebraron con alborozo su "cantada" frente a Colombia, un gol por debajo de las piernas en un lanzamiento de falta del que se hizo mofa en el estadio y hasta la saciedad en las redes sociales. Hasta el mejor escribano echa un borrón. Incluso dos, porque en la última jugada del partido midió mal en la salida y propició el empate de las colombianas.
Por último, se suman sus declaraciones al final del partido en el que Estados Unidos cayó eliminado por Suecia en la tanda de penaltis, tras el empate a uno en el tiempo reglamentario. Llamó "cobardes" a las jugadores suecas por su planteamiento táctico. "Tuvimos muchas oportunidades de gol. Logramos empatar y estoy muy orgullosa de mi equipo. También creo que jugamos contra un grupo de cobardes. Creo firmemente que el mejor equipo no ganó hoy", dijo la portera al acabar el encuentro jugado en el estadio Mané Garrincha, de Brasilia; "Suecia no quiso jugar un fútbol bueno y bonito. Fue un partido físico, exactamente el que ellas querían. No intentaron salir al ataque y solo quisieron hacer daño en el contragolpe".
Los brasileños celebraron la eliminación y en las redes sociales despidieron a Hope Solo... cariñosamente:
Estados Unidos aspiraba a su sexta final consecutiva y a la quinta medalla de oro. Será la primera vez que se quede sin medalla desde que el fútbol femenino fue introducido en el programa olímpico en Atlanta'96. Y eso duele. Pero a Hope Solo le falta elegancia y fair play.