(Foto: Cuenta de Lea T en Instagram)
Será una de las protagonistas de la apertura en Maracaná. Lea T representará a la comunidad transexual brasileña, y por extensión, de todo el mundo. La ceremonia será presenciada por 70.000 personas en el estadio. Se calcula una audiencia televisiva potencial de 3 billones de espectadores. Compartirá escenario con otra famosa modelo Gisele Bündchen. También, entre otros, han sido invitados Gilberto Gil y Caetano Valoso.
Al anunciar su presencia en la ceremonia dijo a BBC Brasil: “Seré portavoz de mi género en un momento en el que Brasil estará a la vista de todo el mundo (…) No puedo revelarles qué papel desempeñaré, para no estropear la sorpresa, pero el mensaje será claro: inclusión para todos, independientemente de su orientación sexual, su color o su credo porque todos somos parte de la humanidad. Yo, como cualquier otra transexual, levanto una bandera. Hablo de transexualidad porque es parte de mi historia, pero apenas soy una más de una comunidad muy grande”.
Nació en Belo Horizonte en 1981 aunque se crió en Italia. Aunque es hija de Toninho Cerezo -ex futbolista de la canarinha entre 1977 y 1985, compañero de Zico y Sócrates, se la conoce de sobra en el mundo de la moda. Tras hacer una campaña para Givenchy adoptó el nombre de Lea T. Ha trabajado para Benetton, y ha sido portada de Newsweek. Es, en la actualidad, imagen de Redken de L'Oréal.
Pionera como top-model transexual y ejemplo de inclusión, se hizo muy popular por ser aquella mujer que besó a Kate Moss en la portada de la revista británica Love. Ha sido una de las pocas personalidades brasileñas que ha participado en el programa de TV de Oprah Winfrey,
Es imprescindible que toda la diversidad que significa Brasil esté presente en un evento con semejante repercusión, para seguir avanzando en la lucha contra los prejuicios, por la igualdad de derechos y, en el caso de este país, contra la violencia hacia el colectivo LGTB. En 2015 fueron asesinadas 318 personas, más de la mitad gays, según el Grupo Gay da Bahia. En 2014 fueron 326.
Aunque 2003 pueden participar en los Juegos atletas transexuales, tenían que acreditar haber realizado la cirugía de reasignación sexual. En Rio, por primera vez en la historia olímpica, regirá una recomendación (no obligatoria) de la Comisión Médica y Científica del COI de 2015 que establece que atletas transexuales puedan competir con su nuevo género incluso si no han realizado la cirugía de reasignación sexual. La idea es garantizar que los atletas trans no sean excluidos, porque que un cambio quirúrgico no ha de ser limitativo ni condicionante del pleno desarrollo y respeto a los derechos humanos.
No obstante, en el caso de las atletas transexuales femeninas, hay dos requisitos: que se identifique como tal y que no haya alteraciones en cuatro años, y que el nivel de testosterona sea inferior a 10 nmol/l en los doce meses previos a la competición.
Una vez olvidado el caso de Caster Semenya, no se conoce ha hecho pública la identidad de ningún atleta transexual en Rio'16.