Una bicicleta de trail. Un aficionado al ciclismo. Un descenso tras haberlo "dado todo" para coronar cima.
Sea pequeña o grande, no puede faltar en una salida en solitario o en grupo una buena bajada. Desde el Rafa Nadal Sports Centre ofrecen cinco consejos para disfrutar al máximo el descenso.
No hablamos de bicis de descenso, orientadas a bajar a la mayor velocidad posible, sino de las trail o 'all mountain', las más comunes, diseñadas para rodar en todo tipo de superficies: pistas forestales, caminos de tierra, tramos pedregosos, sendas de monte y asfalto.
1. Adopta la postura adecuada
Al realizar un descenso en bicicleta este aspecto es clave, ya que lo que buscamos principalmente, es repartir bien nuestro peso tanto en los laterales como en la parte trasera, además de aproximarnos a nuestro centro de gravedad lo máximo posible.
Para conseguirlo, debemos asegurarnos de que movemos nuestras nalgas hacia atrás, para aumentar el peso que recae sobre esta zona de la bicicleta. Al mismo tiempo, debemos que inclinar el torso y la cabeza hacia adelante, así conseguiremos ganar más estabilidad (sobre todo en las frenadas).
2.La fuerza también importa
Al descender en bicicleta cogemos mucha velocidad y, a cierta velocidad en determinados terrenos, las vibraciones que se producen en nuestra bici pueden provocar que acabemos haciéndonos daño. Podemos solucionar este inconveniente poniendo en práctica también nuestra fuerza muscular.
Lo más aconsejable es trabajarla principalmente en brazos, espalda y piernas; bien en el gimnasio o en casa un par de veces por semana. Sin duda adquiriremos más control sobre nuestro propio cuerpo, así como en la bici.
3.Mueve tu peso hacia los laterales
En el primer punto sobre posturas correctas, ya hemos visto la importancia de repartir bien nuestro peso a la hora de descender en bicicleta. Una de las cosas más útiles será también mover nuestro peso hacia los lados, sobre todo al girar y en las curvas.
Así pues, giraremos utilizando mayoritariamente nuestra cadera, repartiendo más o menos peso a izquierda o derecha dependiendo del cambio de dirección que deseemos.
4.El salto frontal será tu gran aliado
Los saltos frontales, así como los caballitos, en los que se monta con la llanta delantera en el aire y la trasera en el suelo, nos pueden sacar de más de un apuro en los descensos, pero la clave está en saber cuándo realizarlos. Por ejemplo, si estamos bajando muy rápido y nos topamos con un escalón, lo más óptimo es el salto frontal.
Hay que adoptar la mejor postura, agarrar bien nuestro manillar con seguridad y llevar el cuerpo ligeramente hacia atrás. Si por el contrario, no llevamos demasiada velocidad, optaremos por realizar un sencillo caballito para superar el obstáculo.
5.Ve un paso por delante
Ir siempre un paso por delante es imprescindible, y más cuando se descendemos por las colinas a dos ruedas. No hay que ir estresado por lo que pueda pasar, pero se ha de estar alerta y no perder nunca la vista del terreno. Evitemos despistes innecesarios.
Atención a posibles obstáculos que, si no vemos con al menos unos tres metros de distancia, puedan hacernos caer.
Siempre es aconsejable haber planificado nuestra ruta con antelación, conociendo bien el tipo de terreno y los descensos, así como la técnica que vamos a seguir para completarlos.
(Fuente: Blog de Rafa Nadal Sports Centre)